ROTA Y ENTERA

El Señor nuestro Dios, es solamente uno. Amarás al Señor, tu Dios, con todo el corazón, con toda el alma, con todas tus fuerzas. Las palabras que digo quedarán en tu memoria, se las repetirás a tus hijos y hablarás de ellas estando en casa y yendo de camino, acostado y levantado.







jueves, 9 de agosto de 2012

Madrugo por Ti

Hoy es un día muy especial, la capilla permanece abierta desde las 8 de la mañana hasta mediodía. Antes de que abrieran ya estaba allí, tenía que hacer muchos recados pero todo es secundario al lado de Dios. Es maravilloso rezar Laudes delante del Santísimo, y es algo que muy pocas veces puedo hacer. Allí parece que el Señor está más cerca, que la lectura del Evangelio del día te dice mucho, y es que ¿Cómo no va a ser así? ¡Está el Señor presente! 
Me decía algo precioso, ¡No tengas miedo!, y es cierto lo que dice, cuando Dios está en tu corazón nada ni nadie puede apartarlo, nadie puede matar tu alma. Eres tú el que decides si entra y el que decides expulsarlo. Yo no puedo expulsarlo, he caído rendida a sus pies, tanto, que me cuesta no hablar de Él a todas horas ni hacer cosas por Él. Una vez que subes a la montaña, descubres donde está el sentido de tu vida y el Padre te abraza, te cuesta volver a bajar a los pies de la montaña, donde todo te parece carente de sentido pero que es donde el Señor quiere que nos santifiquemos y nos preparemos para la vida eterna. Es en el mundo terreno donde ayudamos a Dios a construir el Reino de los Cielos.
He terminado los recados, pero no podía volver a casa sin pasar otra vez a saludarle, esta vez a contemplarlo, porque la fuerza que irradia es la misma que me hace levantarme todos los días...¡Mi espíritu madruga por ti! 
Allí alguien no paraba de leer y leer, son distintas formas de adorarle, yo no podía parar de mirarle, me inunda con su amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario