Cuanta fortaleza tuvo Jesús, solo en el desierto, con hambre y sed, pero no hay excusas para decir que no al demonio. El siempre vuelve, está alerta para encontrarte bajo de guardia y acechar. En la vida de Jesús estuvo muy presente, nada mejor que decir que había logrado vencer al Hijo del Altísimo, pero era imposible a pesar de su condición humana, su alma no pertenecía a este mundo. Todos somos tentados y todos perdemos batallas, pero lo importante es vencer la guerra. Actúa así. sabe de tu punto débil, sabe que es lo que te perturba y donde puede hacerte titubear. Cuando siente que estás distraído enciende la mecha esperando que no te des cuenta. Antes no era consciente que ese era el demonio, ahora que lo conozco, hay veces que lo siento venir en cuclillas, silencioso y deseoso de que como Adán, coma de la manzana.
Afortunadamente después de la tempestad viene la calma. Hoy es una calma de esas preciosas. Me voy de retiro para poder adentrarme en la Cuaresma de lleno y luego Eucaristía. Estoy deseando. Solo por eso merece la pena seguir luchando, el saber que alguien hace muchos años murió para que yo pudiera vivir. Ya sabéis, el demonio siempre vuelve, pero nosotros los cristianos tenemos un arma muy poderosa, conocemos a aquel que ilumina nuestras tinieblas: "invocaré su nombre y él me librará de las fauces del león que anda rondando buscando a quién devorar".
"Antes no era consciente que ese era el demonio, ahora que lo conozco, hay veces que lo siento venir en cuclillas, silencioso y deseoso de que como Adán, coma de la manzana. "
ResponderEliminarDescribes bastante bien al Mal, él siempre nos acecha. Sólo nos queda la oración.
Un saludo
Preciosa reflexión. Ante la tentación lo mejor es vivir prevenidos. Feliz retiro. Acuérdate de tus amigos de la red. Un saludo!
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